Donde habré metido yo mi cabeza?
Llevo unos días un poco aturullado, no sé por qué razón será pero el caso es que me encuentro sin ganas, sin fuerzas, yo le achaco mucho a los cambios de tiempo del otoño, es cierto que me levanto muy temprano, estamos en ese período del año en el cual salgo de mi casa de noche y cuando vuelvo de trabajar ya es de noche, no sé si lo he comentado alguna vez pero a mí no me gusta la noche, siempre he pensado que la noche era para los murciélagos (me encanta esta palabra), no me gusta el calor, disfruto más con el fresco, precisamente hoy mientras realizaba mi entrenamiento diario corriendo por el parque del retiro, en Madrid, pasaba por una zona en la que tanto las imágenes del camino, como los olores que produce el otoño, me hacían disfrutar de cada zancada, muchas veces te preguntas como puedes disfrutar corriendo (es la menos veces), la mayoría se sufre, pero hay algunas veces y algunos momentos en los que por la temperatura, por la humedad, por el relieve, por tantas bellezas que nos proporciona la naturaleza disfrutas del camino.
Espero que este fin de semana, salga aquello que creo que esto incubando, o si es solo cansancio o agotamiento proporcionado por la estación otoñal, mi cuerpo se vaya habituando a estos cambios climáticos que nos proporciona la naturaleza.
Por cierto si alguien, es tan amable que haya visto mi cabeza, por favor que me la devuelva, más que nada porque tengo las gafas en la mano y no sé donde dejarlas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario