No saben perder.
“A falta de siete segundos para el final, Víctor Sada, héroe azulgrana toda la mañana, cogió el balón, recorrió la pista y entró a canasta mientras Sergio Rodríguez trató de molestarle en su penetración y Sergio Llull dio un manotazo, que en principio roza el balón. No fue una jugada más. Quedaban 2,3 segundos y ganaba el Madrid 73-72. Los árbitros no señalaron falta y dieron la bola al equipo de Laso, que se adelantó en la final de la Liga Endesa. El Barça estalló en la cancha, con invasión de campo y algún que otro incidente, y después, en los vestuarios. Según fuentes del departamento arbitral de la ACB, la jugada estuvo bien pitada “al 99,9 %”. Fuente diario Marca.
Tirando de refranero popular "En la mesa y en el juego se conoce al caballero" .
El Madrid se hizo con la primera victoria en los play-off, en los que se dirime el título de liga de baloncesto en la presente temporada.
Hay clásicos en fútbol, e igualmente aunque no haya ochenta y tantos mil espectadores, aunque no se retransmita en todas la emisoras de radio en horario de máxima audiencia. También para los enamorados de este deporte hay clásicos en baloncesto, y con tanta pasión como en el fútbol. Y no es porque no se hayan enfrentado ya varias veces, en la Supercopa con victoria clara blanca, en la copa del Rey con dos prórrogas y victoria del Barça, en sendos enfrentamientos en Liga, con un Navarro apoteósico en el feudo culé que destrozó todas las estadísticas y rompió la racha triunfante del Madrid.
Pues después de todo se emplazaron ambos equipos para la final de esta liga, que en la filas madridistas servirían como revancha a la liga perdida el pasado año, gracias al factor cancha en el quinto y definitivo partido.
En el primer cuarto comenzó con defensas novedosas como la individual de Sergio Llulll a Navarro, y posteriormente con un juego continuo de estrategias entre Xavi Pascual y Pablo Laso, como si de ajedrez se tratase. Pero no fue hasta que en el segundo cuarto apareció un actor secundario que tomó el papel de protagonista principal, Víctor Sada, con una serie de triples consiguiendo hasta cuatro de cuatro. Increíble.
El Madrid se sentía impotente después del estirón azulgrana en el segundo cuarto de 14-31. No quedaba otra que remontar. En un tercer cuarto de toma y daca no conseguía bajar nunca de la psicológica barrera de los diez puntos. Sobre todo porque en el Barcelona se animaron otros actores como Navarro o Marcelinho, mientras que en bando madridistas solo Rudy, Llull y el Chacho ponían el acierto.
Y de la misma manera que sucedió en Londres en la final Four, el Madrid con sendos triples de Sergio Rodríguez y varios rebotes ofensivos de Felipe Reyes, auparon a falta de tres minutos a una igualdad en el partido, y completaron la remontada. En esos momentos, cualquiera se podría llevar la victoria, pero el Madrid tocado en su moral, sobre todo con la dura derrota contra Olympiacos, en dicha final Four, saco a relucir su casta en esos fatídicos minutos, y solo una jugada polémica al final pudo haber decantado la balanza.
Nos quedan partidos muy interesantes, y creo que los blaugranas deben pensar más en no hacer perder de nuevo rentas ventajosas que en errores arbitrales, que también en ello han sido beneficiados, como por ejemplo esa posesión interminable de veintitrés segundos contra el Gran Canaria, o ese tiro de personal a fallar de Tomic en la copa de Rey que le dio posibilidad de jugar la prorroga.
Esto es deporte y hay que saber ganar, pero también hay que saber perder. Y si no que les den lecciones nuestros dos grandes tenistas este pasado domingo en Roland Garros.
Yo por mi parte a seguir disfrutando con este deporte y si cabe también con la victoria del Madrid.
No hay comentarios:
Publicar un comentario